lunes, abril 11, 2005

Sobre las Repúblicas del Río de la Plata II


Por otra parte los Uruguayos me caen muy bien, bueno en mi vida he conocido como a 15 , ¿por qué tantos? pues porque una tía prestaba algunos cuartos de su casa, por una temporada, para que vinieran a vivir familias completas que necesitaban que alguno de sus hijos fuera atendido de un problema de salud, generalmente relacionado con problemas para caminar.

Además de una chica de la Facultad, llamada Oriana que es muy agradable.

Bueno hay sus excepciones: Nelson Carro me cae mal.

Recuerdo que uno d los que se quedaba en casa de mi tía había sido entrenador de fútbol de un equipo de segunda división.

Después de que terminaba el tratamiento del hijo, regresaban de vacaciones o hablaban por teléfono o enviaban una carta. Hasta mantengo fresca en mi memoria aquel día en que a mis 11 años jugué botella con unas gemelas uruguayas, encerrados en un cuarto. (que gran día)

Pero el chiste de este post, es que los uruguayos no me defraudaron: Whisky es una buena película. Hace aproximadamente dos años decidí dejar de ver cine argentino, pero en este caso era uruguayo, así que accedí.

La historia de un sesentón judío uruguayo vendedor de calcetines, con aspecto de cadáver y de una supervisora sesentona carismática disciplinada de la ínfima fábrica de calcetines cuya monótona y rutinaria relación hasta el hartazgo; se verá drásticamente modificada con la llegada del hermano más joven : exitoso optimista cuarentón que huyó del gris Montevideo al carnavalesco Sao Paulo para seguir haciendo calcetines (como de esos que venden en Bershka).

Par de directores uruguayos (Pablo Stoll y Juan Carlos Rebella) conscientes de las posibilidades de expresión del cine, de la utilización de cuerpos cortados, de fuera campos y de campos vacíos para dar un respiro al espectador.
De los créditos iniciales, alternados con insertos en secuencia de un conductor en subjetiva manejando a través del alba montevideana.

De secuencias casi idénticas que demuestran la rutinaria vida de los personajes, que sólo se diferencian por pequeños detalles y por mostrar lo que no se vio en la anterior, un cambio en la forma; en pasar de planos detalles a planos medios en la revisión de salida del par de obreras.
Película con final abierto que plantea más preguntas que respuestas, Película que toma en cuenta al espectador para que construya su historia a partir de los elementos dados.

Sobre las Repúblicas del Río de la Plata I

El domingo pasado, otra vez de vuelta en la Cineteca, estaba sentado al lado de dos ancianas argentinas, la cuales para variar, estaban hablando pestes de México: De que no somos unidos, de que en Argentina si hacen paros nacionales, de que si hay resistencia civil, de que Obrador esto y aquello, de que aquí es un desmadre.

- Es el momento en que te dan ganas de voltearte y decirles: " si tanto critican al país, si lo comparan a cada rato con Argentina, si tanto están inconformes con él, por qué no se largan a otro o se regresan al suyo".
Siempre he oído a la mayoría de los argentinos hablar pestes de México, de que la gente es fea, de que apestan las calles a coladera, se burlan de que comemos maíz y que allá en su civilizado país sólo lo comen los puercos; se pasean en las calles con aires de superioridad que les da su aparente imagen pseudo europea.
No me molesta el hecho de que vengan, de que ocupen plazas de trabajo, eso hasta cierto punto es razonable. Lo que de verdad me molesta es que hablen pestes y comparando al país que les da de comer, el país que les brindó la oportunidad de instalarse después de que en su país los perseguían por su postura política o por la crisis económica.
Pero no todos los argentinos me caen mal hay gente muy valiosa, además llegaron académicos que han enriquecido a la universidad. Puedo decir que respeto, admiró y me caen bien distintos personajes de dicha nacionalidad:
Julio Cortázar (Aunque si me pongo estricto nació en Bélgica).
Jorge Luis Borges.
Gustavo Cerati
Soda Stereo
Carlos Gardel (Si me sigo poniendo estricto nació en Francia).
Diego Armando Maradona
César " El Chelito" Delgado
Luciano Figueroa
Cesar Luis Menotti
Los Babasónicos.
y un amigo de un primo llamado Andrés.

Retroceso Mensurable: Domingo pasado en la cineteca

El domingo pasado me di cuenta de una cosa, Godard no está de moda, las 3/4 partes de la sala entraron a ver Nuestra Música por que ya no había boletos para las demás funciones. Más bien está de moda decir que fuiste a "ver una de Godard" pero sin siquiera hacer el esfuerzo de tratar de saber o de realmente comprender lo que está proponiendo, lo que busca con el Cine, lo que hace con él.

Está de moda decir "que te aburrió Nuestra Música", que es un pretencioso, que su película es prescindible y que no llega a nada (cada quien su opinión, respetable) . Está de moda hablar de la teoría de Godard cuando la mayoría de las películas mexicanas y del mundo siguen haciendose igual que hace 40 años, cuando los "realizadores" siguen sin tener idea del fuera campo y de las posibilidades que este puede dar. De seguir usando el sonido como simple acompañamiento de la imagen. De utilizar el contra - campo simplemente para ilustrar como cada personaje mueve la boca cuando habla.

Pienso que Godard se ha dado a concocer entre los pretensiosos, gracias al bodrío de Los Soñadores, y se que no tardará el día en que alguien vaya por la calle con una playera amarilla con la leyenda "New York Herald Tribune". Pero por otra parte es bueno y espero que se le reconozca todo lo que ha hecho por el cine y que todos esos pretenciosos sepan porque Godard es quien es.

Al fin y al cabo, aunque Jean Luc Godard muera, sus películas, su teoría, sus propuestas, su Cine siempre estarán ahí para la humanidad.